Al fin los vendedores de inmuebles particulares y algunas constructoras han salido de la mentalidad "vender obligatoriamente por el triple de lo que cuesta" y poniendo los pies en la tierra han bajado radicalmente los precios de la vivienda. Aun así, en España, no hay demanda suficiente debido al endeudamiento causado por la no opción a compra sin hipoteca... Hasta los vendedores y especuladores inmoviliarios, generalmente están hipotecados de su primera, segunda y hasta tercera vivienda si preguntamos a cualquier particular, hagan la prueba.
Por fin el libre mercado ha impuesto la bajada de precios, pero ahora la demanda se encuentra en inversores extranjeros que han visto una oportunidad, por lo que los precios bajos, presumiblemente cambiarán en los próximos meses. Ni siquiera en los peores momentos se deja margen al autoajuste de precios para una futura subida, ¿qué será del mercado interior español en el tema inmobiliario?
Aun no se sabe si esto beneficiará o perjudicará a la sociedad española en términos económicos, pero todo lo que signifique movimiento y subida está relacionado a una salida de la crisis, aunque no está relacionado a la mejora de poder adquisitivo del ciudadano medio. ¿Qué se podría hacer? Primero analizar este desarrollo y controlarlo para que no se desvíe del objetivo principal, salir de la crisis, pero quizá debería potenciarse la inversión en creación de nuevas empresas e investigación en otros sectores económicos para no volver a caer en la tentación de convertir la construcción en el apoyo y sustento de toda la economía española.
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