domingo, 20 de diciembre de 2009

Avatar, motor del 3D

La noticia nos habla del estreno de Avatar, la esperada película de James Cameron, la mayor producción hasta la fecha con un presupuesto de 320 millones de dólares. También se comenta la colaboración de Panasonic y de cómo esta película se ha desarrollado a la par de la tecnología 3D casi de manera simbiótica.

Cuatro años de rodaje han servido como laboratorio de pruebas de la nueva tecnología tridimensional, ya que Avatar fue concebida en 3D.

La colaboración de Panasonic ha servido tanto a la película, como a la propia marca y la tecnología 3D.



En este caso, y con ese coste de producción, la decisión de que Panasonic formara parte del proyecto no es en sí ni acertada ni lo contrario, ya que Panasonic ha desarrollado el 3D para un uso comercial del mismo durante el rodaje y ha conseguido una buena publicidad por parte de James Cameron.

Podemos comprobar que la unión de esfuerzos amplía los factores productivos, y claro está, aumenta la productividad, el resultado, una de las películas más taquilleras del mundo en los últimos años, un excelente trabajo de marketing, y cuatro años bien invertidos por Panasonic en la carrera del 3D.

De esta manera, Panasonic se sitúa como la marca puntera en el 3D, y la mejor garantía es Avatar.

En cuanto a la toma de decisiones, me parece muy acertado ofrecer la película también en 2D tradicional con distintos formatos de imagen, para que todos los cines, en un primer momento, puedan sacarla, y para que el día de mañana no hagan falta sofisticados aparatos domésticos para poder verla (nada va a impedir que se venda Avatar). La diversidad de productos, o en este caso, de formatos de un producto hace que llegue a más público, que más gente esté dispuesto a comprarlo.

Los grandes beneficiados son James Cameron con una renovada publicidad de las superproducciones más caras del cine, y Panasonic en el desarrollo de sus productos
3D. Como perjudicados, productoras que hayan sacado sus películas a la vez que Avatar, aunque en Hollywood ya saben cómo solucionarlo y evitar que dos películas potencialmente taquilleras se estrenen a la vez.

Como marca electrónica lider en el panorama audiovisual, me haría trizas por conseguir la información de la próxima superproducción y aprovechar el camino andado por Panasonic para poder hacerle la competencia en un mercado que ya no es del futuro más cercano, sino de ahora, el mercado de la tecnología 3D

domingo, 13 de diciembre de 2009

OFCOM opina que la transición al 3D pasa por el formato 2D Plus Difference

El regulador británico OFCOM defiende que es mejor el formato 2D Plus Difference que el 3D por el momento, ya que este formato no requiere de un receptor 3D.
El debate se centra en la emisión de contenidos de efecto tridimensional en televisión que va a imponerse dentro de poco. OFCOM demuestra que con este sistema no es necesario que la audiencia televisiva tenga que modernizar sus receptores para poder ver contenidos tridimensionales, y además defiende que este soporte permitirá en un futuro reducir el ancho de banda necesario para su emisión.

La realidad es que existiendo bienes sustitutivos en cuanto a medios de comunicación de masas como pueden ser internet y otros, la televisión está en desventaja, y obligar a los espectadores a adquirir un equipo 3D resulta ser más inconveniente para sacar a flote la televisión.

En el caso de España, ya se está llevando a cabo el llamado apagón analógico, y todos hemos tenido que comprar un receptor para la TDT. A eso debemos sumar la alta definición y un equipo compatible. Renovar por completo todos los equipos sólo supondrá un engorro a los espectadores, ya que la imagen 3D sin gafas polarizadas es aún una utopía.

De esta manera, con este formato, la televisión puede tomar ventaja de los contenidos tridimensionales frente a otros medios masivos de comunicación sin necesidad de cambiar de equipo. Era la renovación que necesitaba la televisión para ponerse a la altura después de la dudosa ventaja que ofrece para el espectador la imposición de la TDT. Mejorando los factores productivos se incrementa la productividad y se desplaza la frontera de posibilidades de producción.

Esto realmente beneficia a cadenas y espectadores. La televisión podrá emitir contenidos tridimensionales y posicionarse frente al resto de los mass media y el espectador podrá disfrutar de ellos sin necesidad de comprar una nueva tele...

Los perjudicadas serían las empresas que han invertido grandes sumas de dinero al desarrollo del 3D (menos el formato 2D Plus Difference) pero estas pérdidas se verán recuperadas ya que el futuro es el 3D.

Yo aprovecharía poniendo al alcance del espectador aparatos descodificadores de TDT y TDT de pago en alta definición y con posibilidad de 3D aprovechando las fluctuaciones del sector.